Llamado a la Adoración
Isaias 12:2-6
Líder: ¡Dios es mi salvación! Confiaré en él y no temeré. El SEÑOR es mi fuerza, el SEÑOR es mi canción; ¡él es mi salvación!
Todos: Alaben al SEÑOR, invoquen su nombre; den a conocer entre los pueblos sus obras; proclamen la grandeza de su nombre.
Líder: Canten salmos al SEÑOR, porque ha hecho maravillas; que esto se dé a conocer en toda la tierra.
Todos: ¡Canta y grita de alegría, habitante de Sión; realmente es grande, en medio de ti, el Santo de Israel!
Reflexión Mediante La Doctrina
Líder: ¿Por qué fue necesario que Cristo se humillase hasta la muerte?
Todos: Porque la justicia de Dios no se podía satisfacer por nuestros pecados, sino con la misma muerte del Hijo de Dios.
Confesión de Pecados
Todos:
Dios, Tú nos amas aun cuando nosotros no te hallamos amado. Tú castigas el pecado, pero has prometido tener misericordia por medio de Cristo. Nosotros confesamos que hemos pecado y hemos ofendido Tú santidad. No hemos amado a nuestro prójimo. Tampoco hemos huido de las tentaciones y el pecado. No tomamos con la seriedad que deberíamos tus mandamientos, tus promesas, tu misericordia y tu justicia. Padre, Tú que eres misericordioso, ten misericordia de nosotros. Reconcílianos contigo, y haz que la sangre de Cristo nos limpie de todos nuestros pecados. Amén.
Seguridad de Perdón
2 Corintios 5:17-18, 21
Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! Todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el ministerio de la reconciliación:Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios.
Bendición Pastoral
Que aquel que va montado en un caballo blanco, al que llaman Fiel y Verdadero.
Cuyos ojos son como fuego ardiente, y tiene en su cabeza muchas coronas.
Que está vestido con un manto sumergido en sangre, y cuyo nombra ha sido predicado hoy.
Guarde vuestros corazones y vuestras mentes con la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento.
Que el Señor sea contigo. Y contigo también.